MENTIRAS
DE LA GUERRA
Os
recomiendo esta web de www.cadenaser.com dedicada a la manipulación
mediática, se titula LAS MENTIRAS DEL CONFLICTO: http://www.cadenaser.com/especiales/irak/CONFLICTO_ACTUAL/MENTIRAS2.htm
La
Bolsa y otras instituciones financieras neoyorkinas han expulsado a
los periodistas enviados por la cadena Al Jazeera ya que los canales
norteamericanos han perdido audiencia y han dejado de ser la referencia
de propaganda y manipulación del Gobierno norteamericano para
el resto del mundo.
EE.UU.
denuncia a Irak por incumplir el tratado de Ginebra acerca de la grabación
de presos de guerra y su humillación. ¿Acaso olvidan las
imágenes difundidas en todo el mundo de los presos de Guantánamo
o su soberbia al mostrar en los 2 primeros días de guerra a más
de 2000 soldados presos irakies que se habían rendido?
Si
no es una invasión, sino la liberación del pueblo irakí,
¿por qué los comandantes americanos sustituyen las banderas
soberanas y legales irakíes de cada puerto, ciudad y pozo petrolífero
por la norteamericana????
PRÓXIMAS
CONVOCATORIAS POR LA PAZ
Todos
los días concetraciones en las plazas de todo el mundo a las
20h (hora española) para guardar 15 minutos de silencio y leer
poemas humanistas.
Hoy martes 25 de marzo, el colectivo de artistas, músicos y actores
"cultura contra la guerra" anima a todos los españoles
a denunciar los actos desproporcionados de la policía en Madrid
y a que se sumen en su denuncia A JOSÉ MARÍA AZNAR TRIBUNAL
INTERNACIONAL DE LA HAYA.
El miércoles 26 de marzo hay huelga general de estudiantes de
Instituto y Universidad en Europa con concentraciones a mediodía
en toda las ciudades Españolas y paro laboral de 15 minutos en
todos los centros de trabajo. En Madrid marcha de estudiantes 12h ATOCHA-SOL
El jueves 27 de marzo día mundial de protestas alternativas:
boicot a TVE, a productos norteamericanos, al uso de carburantes y coches,
caceroladas y apagón de 15 minutos de luces, coches y aparatos
eléctricos y celulares a las 22h (hora española), las
imágenes serán recogidas por satélite.
El sábado 29 grandes marchas pacíficas a todas las bases
americanas en territorio europeo, en Madrid gran marcha a Torrejón
12h.
El jueves 10 de abril HUELGA GENERAL LABORAL EUROPEA: En ESPAÑA
paro total de media jornada (4 horas), manifestaciones en todo el mundo
en contra de la masacre y la invasión, vigilias, homilías
y conciertos en favor de las víctimas inocentes.
Marchas y concentraciones en todas las poblaciones españolas
a los locales de TVE en protesta por el tratamiento de la información
que todos los españoles pagamos.
Escribir en los extremos de todos los billetes (monetarios) del mundo
en un lado NO A LA GUERRA y en el otro NO WAR. Se espera que en un mes
la mitad de los billetes de EUROS de la Unión Europea lleven
un mensaje de PAZ.
WEBS
DE INTERÉS INFORMATIVO NO MEDIÁTICO PARA SEGUIR EL CONFLICTO
(O BARBARIE):
http://madrid.indymedia.org/
http://www.culturacontralaguerra.org/
http://www.noalaguerra.org/
http://www.noalaguerra.com/
http://www.contralaguerra.org/
http://www.sindominio.net/
http://www.nodo50.org/
http://www.lahaine.org/
http://www.rebelion.org/
http://www.sindicatodeestudiantes.org
http://www.yellowtimes.org/
INFANCIA Y JUVENTUD DE FRANCISCO JAVIER ANSUÁTEGUI
El "señor" Delegado del Gobierno en Madrid tuvo una
"bella" infancia de yugos y flechas. Aqui la cuenta un compañero
de estudios.
Eres hijo de un notario que fue alcalde de mi pueblo Xativa, allá
por los años cuarenta. Fuimos juntos al colegio, donde tú
y tu hermano erais conocidos por ser los más brutos y beatos.
sin embargo, tu "vocación política" hay que
situarla en el Instituto de Enseñanza Media, donde tú
y tu hermano Pedro me llevabais un curso, los dos érais falangistas
del Frente de Juventudes. A cada efemérides (muerte de José
Antonio, Dia del Estudiante Caído, ...) acudiais con vuestra
camisa azul y recuerdo que tratabais de obligarnos a los demás
a que fuésemos a vuestros actos conmemorativos. En los actos
religiosos obligatorios os dedicábais a darnos golpes y palizas
a los que no nos tomábamos en serio el Rosario, la Ofrenda de
Flores a María... Recuerdo perfectamente el día que me
sorprendistes sin rezar y armando cachondeo, y me zurraste en la misma
capilla una somanta de golpes que me hincharon la cara. Tú no
te acuerdáras ¡Como hostiabas a tantos...! El día
en el que hubo tiros en Madrid, entre falangistas, en el año
1956, estabas en el preuniversitario y recuerdo que subiste al colegio
que dabas miedo. Parecías dispuesto a todo. Por esas mismas fechas
ocurrió un incidente muy significativo: Franco empezaba a pensar
en reinstaurar la Monarquía en la persona del actual monarca
Juan Carlos. Esto no gustaba a ciertos sectores falangistas, entre los
que estabas tú, y aprovechasteis los funerales por la muerte
de José Antonio, que entonces se hacia en El Escorial, para armarla
ante el propio Franco. Los de mi curso, y yo entre ellos, por casualidad
estábamos allí llevados por el profesor de "formación
del espiritu nacional". Comenzado el lío, todos nos acercamos
al lugar donde se veía el follón y allí precisamente
en primera fila, estabas tú, Javier Ansuátegui. Ibas a
la cabeza de un grupo de gentes con las camisas azules y negras (a nosotros
estos últimos nos parecian italianos) y recuerdo que cantabais
las siguientes estrofas: "Que no queremos reyes idiotas,aunque
sepan gobernar.Y por pelotas, y por pelotasimplantaremos el Estado Sindical.Viva.
Viva. Falange y de las JONS" ¿Te acuerdas Javier de aquellas
estrofas? ¿Las sigues cantado ahora que eres gobernador civil?.
El incidente no pasó de ahí. La policía nos impidió
acercarnos a Franco cuando éste apareció, y vosotros,
que érais unos cincuenta os cansasteis de repetir la cancioncilla.
Pero no paró ahí mi suerte de coincidir contigo. En la
Facultad de Derecho volvimos a encontrarnos. Tú como del SEU
(Sindicato Español Universitario) que era dirigido por Aparicio
Bernal y luego por Martín Villa. Yo como militante antifranquista.
Estabamos ya en los años sesenta. En las universidades el movimiento
de lucha empieza a nacer en clara confrontarción contra el SEU
al que obligatoriamente nos teníamos que afiliar al matricularnos.
El movimiento antifascista crece. Allí en la Universidad, llegaste
a ser jefe del SEU del Distrito Universitario, y recordarás perfectamente
que tu función era la denuncia política y colaborar con
la Policía, y en todo eso destacaste sobradamente. Como suddelegado
elegido por la facultad me tocó enfrentarme muchas veces contigo;
eras un tío que gritabas y pegabas puñetazos en la mesa,
y te gustaba decir aquello de "como fascista no puedo tolerar una
serie de cosas". Cuando sacamos el primer boletín libre,
clandestino, de la facultad, te falto tiempo para subrayarlo y llevarlo
a la Policía. Eras un chivato especialmente entregado a la causa
del franquismo. Y desde entonces no has parado de tener cargos: Fuieste
letrado sindical. Delegado de Sindicatos, en los últimos años
de Franco, para la provincia de Valencia y has sido gobernador civil
de varias provincias. Seguramente, Javier, dirás por ahí
que eres demócrata de toda la vida, pero ¿recuerdas cuando
levantabas el brazo para agredirnos o para hacer el saludo fascista?,
¿recuerdas cuando cantabas aquello de "no queremos reyes
idiotas aunque sepan gobernar ..."? ¿o cuando proclamabas
que los hombres que más admirabas eran José Antonio, Mussolini
y Hitler? Yo sí lo recuerdo perfectamente. Javier Ansuategui,
no temas pasar por la vida como un hombre gris y anónimo, somos
muchos los que sabemos quién eres y no lo olvidaremos.
Vicente Alvarez Abogado laboralista y catedrático de Derecho
en Universidad de Valencia
COMUNICADO DESDE BAGDAD DE LAS BRIGADAS CONTRA LA GUERRA ACERCA
DE LAS MANIFESTACIONES DEL SÁBADO 22 DE MARZO
22
de marzo de 2003. CSCAweb (www.nodo50.org/csca)
Compañeros, compañeras:
Desde Bagdad: mantened el lema de las movilizaciones de los meses pasados:
"PAREMOS LA GUERRA CONTRA IRAQ".
Desde hace dos días vivimos junto a los cinco millones de hombre
y mujeres, de niños y niñas, de jóvenes y ancianos
de esta ciudad los primeros bombardeos perpetrados por el que debe ser
considerado un nuevo Eje Fascista de esta primera guerra del siglo XXI:
el que componen los gobiernos estadounidense, británico y español.
Este es un Eje Fascista porque está atacando ciudades abiertas,
densamente pobladas, sin apenas capacidad de defensa. Y este es un nuevo
Eje Fascista porque agrede este país contra la voluntad de la
ciudadanía mundial, violando toda ley y todos los derechos, retrotrayendo
a esta zona y al conjunto de la comunidad internacional a los inicios
del siglo pasado, a la época colonial, convirtiendo la democracia
que dicen representar y que pretenden imponer aquí en una burla.
Sabemos que Basora está siendo intensamente bombardeada y aquí,
en Bagdad, hemos podido poner nombres y rostros a las víctimas
de los primeros ataques lanzados al alba el jueves sobre la capital:
una chiquilla de 14 años, herida en las piernas y en el abdomen
mientras desayunaba en su casa en la mañana del jueves.
Su hermana y su sobrina de 14 meses, Haura, heridas ambas en la misma
casa mientras la primera daba el pecho a su hija.
Cinco hermanos ---dos adultos, un adolescente, dos niños--- todos
ellos abrasados mientras veían caer los misiles sobre la ciudad
en las primeras horas de la noche del jueves. Y así hasta 36
en un solo hospital: todos ellos civiles; ninguno de ellos próximos
a centro militar o gubernamental alguno.
No podéis imaginar el impacto de los misiles crucero sobre esta
ciudad amplia y abierta, y el temblor que provocan cuando estallan hinchando
una bola de fuego y una columna de humo oscuro. Es difícil describir
el siniestro sonido de los aviones cuando sobrevuelan nuestra cabezas
lanzando sus bombas. La determinación de este ejército
agresor es la de someter a este pueblo tras haber pretendido rendirlo
por hambre y enfermedad tras doce años de embargo, como si de
un asedio medieval se tratara.
Su brutalidad solo es comparable a su cobardía. Contando tan
solo con su tecnología militar, sin razón, sin dignidad,
sin honor, pretenden arrasar un país que fue cuna de nuestra
misma civilización, poblado de gente admirable. Cada mañana,
tras cada ataque, las gentes de este pueblo salen de nuevo a la calle
y nos siguen sonriendo, agradeciendo nuestra presencia, levantando sus
puños o haciendo el signo de la victoria, amables y confiados
pese a todo, pidiéndonos que os transmitamos su voluntad de resistir
aun cuando ello parezca un milagro inimaginable ante la maquinaria bélica
que se cierne sobre ellos.
Y es que este pueblo no puede parar la guerra sin ayuda: el desequilibrio
de fuerzas es inconmensurable. Este pueblo solo podrá resistir
el diluvio de acero y fuego que cae sobre sus cabezas cada noche si
sabe que os vais a seguir movilizando sin desfallecer. Por favor, con
todos vuestros medios, sin descanso, ayudad al pueblo de Iraq a ganar
esta guerra parándola, colocad a los gobiernos fascistas que
están atacando Iraq ---al propio gobierno español-contra
las cuerdas, arrinconadlos contra el muro de la moral y del derecho,
de la solidaridad y de la fraternidad entre los pueblos.
Un saludo cordial desde Bagdad,
Brigadistas a Iraq contra la Guerra: Maria Teresa Tuñon Álvarez,
Maria Rosa Pañarroya Miranda, Ana Maria Rodríguez Alonso,
Belarmino Marino García Villar, José Bielsa Fernández,
Imanol Telleria, Javier Barandiaran, Manu Fernández y Carlos
Varea González.
Bagdad, 21 de marzo de 2003
TRIBUNA ABIERTA
También las ideas hacen la guerra
La
entrada de las tropas en Irak define un mundo nuevo, en el que sin embargo
hay resabios del anterior. Convicciones, formas de relacionarse y de
entender la política entran en crisis.
Por Umberto Eco. Semiólogo y escritor. y Timothy Garton Ash.
Historiador, Univ. de Oxford..
Las
palabras no aclaran, encubren
Por Umberto Eco. Semiólogo y escritor.
El
anuncio realizado por los Estados Unidos en donde afirma que Italia
apoya sus planes para atacar a Irak es uno de los temas principales
de conversación en mi país.
Esa noticia causó sorpresa entre los italianos, incluyendo al
primer ministro, Silvio Berlusconi, quien ha tratado de suavizar el
tema con mucho tino. Después de todo, decisiones políticas
de esa índole sólo pueden ser ordenadas por el Parlamento.
¿Acaso fue una maniobra del presidente Bush para forzar a Italia
a que esté de su lado? De ninguna manera. Más bien se
trató de una cuestión de antropología cultural.
Es bastante difícil categorizar a los estadounidenses, debido
a que son descendientes de peregrinos anglosajones y protestantes, judíos,
italianos, irlandeses, polacos y portorriqueños ... Lo que convierte
a Estados Unidos en una nación singular es el hecho de que todos
se rigen por un principio fundamental, que en el momento exacto engendra
sentimientos patrióticos.
Se trata de un país que proporciona las necesidades básicas
para la vida y permite enriquecerse, por eso se deben aceptar ciertas
reglas sociales. Noten que no dije "aceptar las leyes", porque
incluso en los Estados Unidos existen criminales, mafiosos, corruptos,
al igual que desertores, marginados y vagos. Pero incluso estas personas,
que deben hacer lo imposible para quedar impunes al violar las leyes,
tratan de observar cómo funcionan las reglas de la sociedad.
Por ejemplo, todos respetan el concepto de hacer cola al formar una
línea, tanto en las estaciones de tren como hasta en los supermercados.
Otra regla fundamental es no mentir. Si uno recibe una invitación
en cualquier ocasión y la respuesta es que no puede asistir porque
está muy cansado, entonces ni siquiera vale la pena seguir insistiendo.
Si por el contrario, uno dice que sí asistirá y nunca
aparece, la gente no lo entiende. Lo importante es decir la verdad.
Recuerden que Al Capone fue a prisión porque evadió impuestos,
y Richard Nixon perdió la reelección a la presidencia
porque mintió.
La confianza depositada por los estadounidenses (que nosotros los italianos
llamamos inocencia) tiene consecuencias funestas. Hace ya tiempo, mientras
me encontraba en los Estados Unidos, extravié mi tarjeta de crédito.
Como no sabía a quién recurrir, mi amigo —residente
de ese país por muchos años— se encargó de
todo al llamar a la persona indicada. Pero al final de la conversación,
el empleado de la compañía de crédito le preguntó
si en realidad él era Eco. Cuando mi amigo le dijo que no, el
empleado explicó que sólo podía terminar ese trámite
si hablaba directamente con el susodicho Eco. Entonces, mi amigo me
puso en el teléfono y le aseguré al empleado que efectivamente
la persona al otro lado de la línea era Eco. El empleado creyó
en mi palabra y obtuve una tarjeta nueva al día siguiente.
Fácilmente pudo haber sido otra persona la que hablara con el
empleado, pero eso sería inconcebible. Ni siquiera le pasó
por la cabeza que yo podía estar mintiendo.
En este punto debería estar claro lo sucedido con Bush. Berlusconi,
sin pudor para realizar promesas, debió haberle dicho: "No
te preocupes. Yo me encargo de todo, tendrás nuestro apoyo".
Y Bush creyó en su palabra.
No es que Bush no sepa mentir cuando se dirige a sus compatriotas. Se
trata de comunicación masiva, basada en los principios de la
publicidad. Y en ese ramo se permite mentir. Pero cuando se trata de
acuerdos recíprocos o de encarar a autoridades conocidas, mentir
está prohibido.
Bush no sabe que en Italia decimos "llamame y nos vemos luego",
o "cuando pases por el barrio ven a mi casa a cenar" sin tener
la más mínima intención de ver a esa persona nuevamente.
Berlusconi le prometió algo y Bush pensó que se trataba
de una intención seria. Pero Berlusconi sólo hablaba por
hablar.
Por eso digo que ésta no es más que una cuestión
de antropología cultural. Incluso en política, uno debe
saber que las reglas de otros pueden diferir de las propias.
Copyright
Clarín y Umberto Eco, 2003.
Todos en la tormenta de arena
Por Timothy Garton Ash. Historiador, Univ. de Oxford.
Al
comenzar la segunda guerra del Golfo Pérsico, escudriñamos
la tormenta de arena, entornando los ojos para discernir el perfil del
nuevo mundo que está más allá. Como casi todos
los mundos nuevos, éste es una mezcla de lo viejo y lo nuevo.
Oficiales estadounidenses sentados frente a pantallas de computadora
mandan "bombas electrónicas" para hacer arder los equipos
de comando de Saddam Hussein a miles de kilómetros de distancia;
frente a esto, las escenas de batallas intergalácticas de "Viaje
a las estrellas" parecen de un realismo propio del siglo XIX. Pero
entonces observo a los soldados de infantería británicos
en Kuwait prepararse para el combate cuerpo a cuerpo. Un sargento mayor
insta a un joven miembro de un escuadrón a lanzar gritos de odio
mientras apuñala una y otra vez con su bayoneta a un muñeco
que representa al enemigo. Esta escena podría desarrollarse en
la víspera de la batalla de Agincourt en 1415: un hombre es programado
psicológicamente para matar a otro atravesándole las entrañas
con un trozo de metal filoso.
Lo mismo ocurre con la política. Hay algo relativamente nuevo:
Estados Unidos se siente tan confiado en su poder militar y su corrección
moral que marcha hacia el interior de la región más explosiva
del mundo con un solo aliado efectivo (dos, si contamos a Australia).
Y algo muy viejo: la diplomacia de las Naciones Unidas finalmente se
redujo a un conflicto entre los más antiguos adversarios de Europa:
Inglaterra y Francia. Lo mismo que en Agincourt en 1415.
En las últimas semanas, el Occidente geopolítico de la
Guerra Fría se ha desplomado frente a nuestros ojos. Nadie puede
saber cuál será la forma del nuevo mundo.
Pero ya podemos ver tres ideas generales que compiten por suceder al
Occidente de la Guerra Fría. Las llamaré la rumsfeldiana,
la chiraco-putinesca y la blairista.
La idea rumsfeldiana es que la fuerza es el derecho de los estadounidenses.
El secretario de Defensa Donald Rumsfeld ve a Estados Unidos como la
superpotencia de los libres, que puede tomar represalias contra el terrorismo
internacional, el nuevo comunismo internacional. También puede
difundir la democracia en lugares como Irak, y así hacer del
mundo un lugar mejor. Si algunos aliados lo quieren ayudar, qué
bueno. Si no, uno se las arregla sin ellos.
La visión rumsfeldiana es cierta a medias y, por lo tanto, totalmente
equivocada. Probablemente es cierto que Estados Unidos ahora puede ganar
casi todas las guerras sin ayuda. Pero no puede ganar la paz sin ayuda.
Y la victoria en la guerra contra el terrorismo tiene todo que ver con
ganar la paz en Irak, en el resto de Oriente Medio y más allá.
La idea chiraco-putinesca es que el poder estadounidense es peligroso.
El presidente Jacques Chirac de Francia cree que no es saludable que
un solo Estado tenga tanto poder, pero que es especialmente peligroso
que ese Estado sea Estados Unidos (en lugar de, por ejemplo, Francia).
La misión de Francia es construir un polo alternativo: Europa,
que, según la geografía gaullista, incluye a Rusia. Ver
a la alianza continental franco-germano-rusa (y china) plantada frente
a la alianza marítima estadounidense-británico-española
(y australiana) en las recientes batallas diplomáticas me hace
pensar otra vez en la guerra de superbloques de 1984de George Orwell.
El los llamó Eurasia y Oceanía.
La visión chiraco-putinesca es cierta a medias y, por lo tanto,
totalmente equivocada. Es cierto que es poco saludable que una sola
potencia, por democrática y benigna que sea, tenga tanto predominio
como tiene Estados Unidos hoy. Pero que Francia haga causa común
con Vladimir Putin y una Rusia semidemocrática (el carnicero
de Chechenia), como también con una China no democrática,
para darle auxilio temporario a Saddam Hussein no es la manera más
brillante de avanzar hacia un mundo multipolar. De cualquier modo, es
imposible unir a Eurasia contra los Estados Unidos. Aun en esta crisis,
la mitad de los gobiernos de Europa anteponen la solidaridad transatlántica
a sus serias dudas sobre la prudencia del enfoque del gobierno de Bush
con respecto a Irak.
Con esto, llegamos al blairismo. La idea de Tony Blair es que debemos
recrear una versión más amplia del Occidente de la Guerra
Fría, como respuesta a las nuevas amenazas que afrontamos. Lo
que él denomina la "conjunción" de las armas
de destrucción masiva y el terrorismo debería asustarnos
tanto como nos asustaba el Ejército Rojo. La forma de manejarse
con el unilateralismo estadounidense no es la rivalidad sino la asociación.
Los socios no son sirvientes. En setiembre pasado, cuando la administración
Bush comenzó a presionar para que se tomaran medidas contra Irak,
Europa debería haber dicho "con una sola voz" que ayudaría
a Washington a enfrentar el terrorismo y las armas de destrucción
masiva, siempre que siguiera el camino de las Naciones Unidas y reiniciara
el proceso de paz israelí-palestino. Europa y Estados Unidos
siempre deberían trabajar juntos a través de las instituciones
internacionales del mundo post-1945.
La idea de Blair es absolutamente correcta. El problema es la ejecución.
Cometió dos grandes errores en el último año. El
primero fue no hacer más en setiembre para tratar de lograr que
Europa hablara con una sola voz. En cambio, se convirtió casi
en un participante de la discusión interna del gobierno de Washington,
mientras descuidaba a Berlín y París, que se mecían
juntos en un vals antibélico.
El segundo error fue olvidar que ser socios a veces también significa
decir que no. Uno tiene la percepción de que Blair es ese tipo
de inglés sumamente decente que siempre dirá que no a
las drogas y nunca le dirá que no a Washington. Si se tiene una
voz europea más fuerte, es más creíble que uno
pueda decir que no, y, por lo tanto, es menos probable que uno tenga
que hacerlo.
Si Blair hubiese manejado bien el aspecto europeo de su estrategia,
quizá Saddam Hussein habría cedido ante la presión
conjunta de Occidente. No estoy convencido de que esta guerra en particular
en este momento en particular sea necesaria o prudente. Ahora espero,
contra toda esperanza, que nuestra victoria sea rápida y segura,
y que las consecuencias en Oriente Medio sean positivas.
Pero de lo que sí estoy convencido es de que la visión
blairista de un nuevo orden de posguerra de la política mundial
es la mejor que puede hallarse en el deprimido mercado del liderazgo
mundial. De esto se deduce que sería un grave perjuicio, no sólo
para Gran Bretaña sino también para el mundo, perder a
Blair a causa de esta guerra. El problema es, por supuesto, que para
concretar la visión blairista se necesita que París y
Washington adhieran a ella. Con Jacques Chirac en una punta y Donald
Rumsfeld en la otra, las probabilidades no parecen muchas. ¿Pero
alguien tiene una idea mejor?
Copyright
Clarín y The New York Times, 2003.
Traducción
de Elisa Carnelli.
Lunes, 24 de marzo de 2003
ELPAIS.es
> Internacional
GUERRA EN IRAK - La política en Washington Los "halcones"
acechan a Powell Los ultraconservadores preparan nuevos objetivos después
de Irak
E. G. - Washington
EL
PAÍS | Internacional - 24-03-2003
Los halcones de Washington vuelan alto estos días. La estrategia
diseñada en 1998 por Donald Rumsfeld, Paul Wolfowitz, Richard
Perle y otros altos cargos del Pentágono se ha desarrollado,
cinco años después, exactamente como deseaban: la ONU
ha sido marginada, las tropas estadounidenses avanzan por territorio
iraquí y el presidente George W. Bush encarna un nuevo siglo
americano de poder unilateral casi ilimitado. Y el gran enemigo de los
halcones, el diplomático Colin Powell, vuelve a escuchar peticiones
de dimisión. En su momento de triunfo, los estrategas del Pentágono
piensan ya en los siguientes pasos y hablan, entre otras cosas, de reducir
la ONU a una función puramente simbólica y de transformar
Irán y Siria. Unos cuantos veteranos del Proyecto para el Nuevo
Siglo Americano, la asociación ultraconservadora convertida en
fuerza ideológica dominante en el Gobierno de EE UU, celebraron
el viernes un desayuno-debate en el Instituto de la Empresa Americana,
el think tank del que emergieron todos ellos. El presidente del Consejo
Asesor del Pentágono, Richard Perle, el discreto cerebro que
nutre de ideas al secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, y al subsecretario
Paul Wolfowitz, bajo el patrocinio del vicepresidente Dick Cheney, exultaba
satisfacción. La inevitable caída de Sadam Husein, dijo,
proporcionaría "inspiración" a los iraníes
deseosos de librarse de los ayatolás. "Me siento optimista
y creo que asistiremos a un cambio de régimen en Irán
sin que sea necesario utilizar la fuerza militar de EE UU", comentó.
En su opinión, la teoría del dominó, o de la onda
expansiva, empezaría pronto a funcionar: después de asistir
al ejemplo de Irak, otros países de la región se verían
forzados a buscar buenas relaciones con la hiperpotencia. El error de
la primera guerra del Golfo, en 1991, fue permitir que Sadam Husein
siguiera en su puesto, apuntó William Kristol, editor de la revista
Weekly Standard. Eso resultó en una disminución del necesario
temor que los dirigentes árabes debían sentir hacia Washington.
Dos días antes, Richard Perle, conocido desde hace años
como El príncipe de las tinieblas por su aspecto físico,
su tendencia a actuar en un segundo plano y su extremismo ideológico,
había participado en un seminario organizado por la sociedad
financiera Goldman Sachs con un enunciado muy sugerente: Implicaciones
de una guerra inminente. Irak ahora. ¿Corea del Norte después?
El miércoles aún no se habían desatado las hostilidades
en Irak. El viernes, con la guerra en marcha, Perle se aventuró
más allá en el futuro. Sugirió que había
"pasado ya la época" en que la ONU se ocupaba de cuestiones
de seguridad y que era necesario reformarla y reducir su función,
limitándola a asuntos como "salud, mantenimiento de la paz
y misiones humanitarias". En opinión de los halcones, el
Consejo de Seguridad carecía de futuro. La legalidad internacional
sólo podía emanar de Washington. Michael Leeden, que fue
alto funcionario de la Administración de Ronald Reagan, calificó
de "asquerosas" las manifestaciones por la paz y opinó
que el actual conflicto formaba parte de una guerra "más
amplia" destinada a afectar sustancialmente a los Gobiernos "filoterroristas"
de Irán y Siria. William Kristol consideró que uno de
los objetivos del Departamento de Estado debía consistir, en
adelante, en "separar" a Francia y Alemania, atrayendo a Berlín
hacia las tesis estadounidenses y aislando a París, con lo que
se castigaría la oposición francesa de los últimos
meses y se debilitaría sustancialmente a la Unión Europea.
Mientras los halcones hablaban sobre el futuro, Colin Powell reflexionaba
sobre el suyo. El secretario de Estado cargaba con el fracaso de Estados
Unidos en la ONU, con el fiasco de la falta de cooperación militar
de Turquía y con las acusaciones de que apenas había viajado
para forjar una coalición amplia. En realidad, no se había
movido de Washington por miedo a que, en su ausencia, los halcones se
hicieran con el control total de la Casa Blanca. El sábado, el
artículo de fondo de las páginas de opinión de
The New York Times reclamaba su dimisión, desde un punto de vista
liberal. Los medios ultraconservadores le rechazan desde hace tiempo.
En los últimos días ha tenido que negar por dos veces
que piense abandonar. Su posición, como en vísperas del
11-S, parece frágil.